NOTICIARIO UNIVERSAL:
MARCHA POR LA PAZ. Miles de personas se oponen a la guerra de Vietnam
(Voz: Ed Herlihy) Manifestantes contrarios a la guerra protestaron contra la intervención de EE. UU. en la guerra de Vietnam en marchas, mítines y manifestaciones. Central Park fue el punto de partida de la marcha que acabó en el edificio de la ONU.
Se calcula que los manifestantes fueron unos 125.000, entre los que había estudiantes, amas de casa, poetas beatnik, médicos, empresarios, profesores, sacerdotes y monjas. El maquillaje y los disfraces eran estrafalarios. Antes de la marcha, se instó a la quema de cartillas militares. Un manifestante afirma que se quemaron 200 cartillas, pero no se ha podido hacer ningún recuento. Reporteros y espectadores eran ahuyentados a propósito.
Aunque la mayor parte de la manifestación transcurrió de manera pacífica, no faltaron los enfrentamientos violentos. Piquetes «anti-antiguerra» salieron al paso de los manifestantes antiguerra.
El líder del movimiento por los derechos civiles Martin Luther King encabezó la marcha hacia las Naciones Unidas donde pedirá a la ONU que obligue a EE. UU. a dejar de bombardear Vietnam del Norte.
La policía arrestó a cinco personas por desorden público. Tres fueron atrapadas al intentar confundirse entre los manifestantes. No obstante, no hubo ningún herido grave durante la mayor manifestación contra la guerra de Nueva York.
Una manifestación por la paz paralela con más de 50.000 participantes tuvo lugar en el centro de San Francisco. Pacifistas y hippies marcharon durante tres kilómetros a lo largo de Market Street. El gigantesco estado Kezar albergó a los manifestantes, que cantaron canciones y dieron discursos desatando la polémica entre las facciones partidarias y contrarias a la guerra. Nadie resultó herido.
Ambas manifestaciones fueron auspiciadas por una coalición poco definida de pacifistas de izquierdas y grupos antiguerra moderados. El presidente Johnson ha declarado que el FBI vigila toda actividad antiguerra.
Irónicamente, la violencia ha estallado en una manifestación por la paz en Roma, cerca de la embajada de EE. UU., en la glamurosa Via Veneto. La policía, alertada por posibles problemas, detuvo la marcha cerca de su meta, y esta se convirtió en una revuelta. Pancartas, sillas de cafeterías y puños volaron en todas direcciones. La siguiente fase era una sentada, pero la policía y los bomberos romanos también encontraron una solución. La solución: H2O aplicada generosamente a gran presión. Los fuertes chorros de agua despidieron a los manifestantes uno tras otro, que se secaron en el calabozo. Una hora llevó a la policía desintegrar la marcha. 33 alborotadores fueron arrestados. Drama interno en la ciudad eterna.