UN LLAMAMIENTO A LA DIMISIÓN INMEDIATA DE TODOS LOS ROCKEFELLER DE LA JUNTA DIRECTIVA DEL MUSEUM OF MODERN ART
Hay un grupo de personas extremadamente ricas que están usando el arte como medio de autoenaltecimiento y aceptación social. Utilizan el arte como disfraz, como tapadera de su despiadada implicación en todas las esferas de la maquinaria de guerra.
Estas personas quieren aplacar su culpa donando dinero y obras de arte manchados de sangre al Museum of Modern Art. Nosotros, los artistas, creemos que no hay justificación moral posible para que el museo siquiera exista si depende solo de la aceptación continuada de dinero sucio. Recibiendo donaciones inmundas de esta gente rica, el museo está destruyendo la integridad del arte. Estas personas controlan las políticas del museo desde su fundación. Con este poder son capaces de manipular las ideas de los artistas, esterilizar cualquier forma artística de protesta social y denuncia de las fuerzas opresivas en la sociedad, y por tanto, de hacer que el arte sea totalmente irrelevante en medio de la crisis social existente.
1. Según Ferdinand Lundberg en su libro The Rich and the Super-Rich, los Rockefeller poseen el 65 % de la empresa Standard Oil. En 1966, según Seymour M. Hersh en su libro Chemical and Biological Warfare, la sede de Standard Oil Corporation en California—un activo de especial relevancia para David Rockefeller (presidente de la junta directiva del Museum of Modern Art)—alquiló una de sus plantas al United Technology Center (UTC) con el objetivo concreto de fabricar napalm.
2. Según Lundberg, los hermanos Rockefeller poseen el 20 % de McDonnell Aircraft Corporation (fabricantes de los aviones de combate Phantom y Banshee utilizados en la guerra de Corea). Según Hersh, McDonnell Corporation ha estado muy involucrada en las investigaciones sobre guerra química y biológica.
3. Según George Thayer en su libro The War Business, el Chase Manhattan Bank (cuyo consejo preside David Rockefeller)—así como McDonnell Aircraft Corporation y North American Airlines (otro activo relevante para los Rockefeller)—están representados en el comité del Defense Industry Advisory Council (DIAC), que opera como nexo de contacto entre los fabricantes nacionales de armas y la International Logistics Negotiations (ILN), que depende directamente de la división de Asuntos de Seguridad Internacional del Pentágono.
Por lo tanto, exigimos la dimisión inmediata de todos los Rockefeller de la junta directiva del Museum of Modern Art.
Respaldado por: The Action Committee for Art Workers Coalition
Nueva York, 10 de noviembre de 1969
GUERRILLA ART ACTION GROUP
Silvianna
Jon Hendricks
Poppy Johnson
Jean Toche
COMUNICADO
Silvianna, Poppy Johnson, Jean Toche y Jon Hendricks entraron en el Museum of Modern Art de Nueva York a las 15:10 del martes 18 de noviembre de 1969. Las mujeres vestían ropa de calle y los hombres, traje y corbata. Llevaban bajo la ropa casi 10 litros de sangre de vaca repartida entre varias bolsas de plástico pegadas al cuerpo. Los artistas caminaron con toda tranquilidad hacia el centro del vestíbulo, donde se juntaron para lanzar 100 copias de demandas del Guerrilla Art Action Group con fecha del 10 de noviembre de 1969.
Enseguida empezaron a arrancarse la ropa unos a otros chillando y gritando cosas sin sentido entre las que cada tanto se colaba una palabra comprensible: «violación». Al mismo tiempo, reventaron las bolsas de sangre ocultas bajo la ropa provocando que emanasen explosiones de sangre de sus cuerpos manchando a los demás, el suelo y las demandas allí esparcidas.
Un grupo de personas, entre los que había tres guardias, formó un círculo alrededor y los observó con atención en silencio.
Después de unos minutos, casi toda la ropa estaba rota y el suelo, completamente cubierto de sangre.
Sin dejar de desgarrarse la ropa, los artistas se fueron tumbando poco a poco en el suelo. Los gritos se convirtieron en gimoteos y quejidos, y la acción pasó de ser una agresión externa hostil a un tormento individual. Los artistas empezaron a retorcerse en el charco de sangre tirando despacio de su propia ropa, emitiendo gemidos de dolor y respirando aceleradamente hasta que se fueron quedando en silencio.
Se levantaron todos a la vez, y la gente se puso a aplaudir de manera espontánea, como en una obra de teatro. Los artistas hicieron una breve pausa sin mirar a nadie y caminaron juntos hacia la entrada donde empezaron a ponerse abrigos sobre los restos de ropa ensangrentada.
En ese momento, apareció un hombre alto y bien vestido que preguntó con tono impasible: «¿Hay algún representante en el grupo?». Jon Hendricks dijo: «¿Tiene una copia de nuestras demandas?». El hombre respondió: «Sí, pero no la he leído todavía». Los artistas siguieron vistiéndose ignorando al hombre y abandonaron el museo.
Nota: —Según uno de los testigos, a los dos minutos de empezar la representación, se oyó decir a uno de los guardias: «¡Voy a llamar a la policía!».
—Según otro testigo, dos policías llegaron después de que marchasen los artistas.
Nueva York, 18 de noviembre de 1969
GUERRILLA ART ACTION GROUP
Jon Hendricks
Poppy Johnson
Silvianna
Jean Toche